Capítulo 1: La nena
Tiene 10 años y es hija de una amiga. Va al colegio Champagnat; colegio recoleto, católico y, aparentemente, oferente de la educación que sus padres, es decir, mis amigos, consideraron como el adecuado para sus tres hijos. Lo cierto es que estábamos entrando a espectáculo infantil cuando la nena me preguntó: "Y vos, ¿de qué lado estás: con el campo o con el gobierno?". Le sonreí. Me turbó la pregunta y no porque no tuviera una respuesta sólida para darle. Sentí la incomodidad que sobreviene ante lo inesperado. El momento, el lugar y, sobretodo, de quien venía: una criatura. Ensayé varias alternativas en voz alta para ver su reacción.
Tiene 10 años y es hija de una amiga. Va al colegio Champagnat; colegio recoleto, católico y, aparentemente, oferente de la educación que sus padres, es decir, mis amigos, consideraron como el adecuado para sus tres hijos. Lo cierto es que estábamos entrando a espectáculo infantil cuando la nena me preguntó: "Y vos, ¿de qué lado estás: con el campo o con el gobierno?". Le sonreí. Me turbó la pregunta y no porque no tuviera una respuesta sólida para darle. Sentí la incomodidad que sobreviene ante lo inesperado. El momento, el lugar y, sobretodo, de quien venía: una criatura. Ensayé varias alternativas en voz alta para ver su reacción.
- Con ninguno.
Me miró extrañada. "No vale, con alguno tenés que estar", insistió. Acaso sus escasos megabites vividos -pensé- no tienen aún incorporada la posibilidad de que en los aconteceres políticos y sociales, a veces, no se está en contra de nadie ni a favor de todos.
- Con el gobierno, retruqué.
- Con el gobierno, retruqué.
"A noooo... ¡Mamá! Mirala está con el gobierno", me señaló ante su madre, mi amiga, y llamando la atención del resto de las personas, entre quienes, a lo mejor, sospeché un posible piquete ante el infantil escrache.
- Con el campo - me apuré, antes de que se iniciara un cacerolazo infato juvenil que me echara del lugar.
- Con el campo - me apuré, antes de que se iniciara un cacerolazo infato juvenil que me echara del lugar.
"Bieeeeen! -celebró- yo también estoy con el campo. Pero no soy golpista".
El espectáculo empezó y la nena disfrutó de los gags, de los payasos, bailarines y trapecistas, en un goce auténtico, ese que conservaba de su edad. Lo mío, en cambio, era puro estupor. Relamía lo agrio de pensar que una nena es capaz de iniciar un escrache en pleno espectáculo infantil contra alguien que intentó no tomar en serio su cuestionamiento sobre una disyuntiva contra la que, evidentemente, no sólo quedamos (forzozamente) atrapados los "adultos".
Capítulo 2: La maestra
Todavía conservábamos la sonrisa que nos regaló la espectacularidad de la puesta en escena, cuando la mamá de la nena, es decir, mi amiga, confesó algo que le preocupaba del colegio donde van sus hijos:
Capítulo 2: La maestra
Todavía conservábamos la sonrisa que nos regaló la espectacularidad de la puesta en escena, cuando la mamá de la nena, es decir, mi amiga, confesó algo que le preocupaba del colegio donde van sus hijos:
"Hace pocos días echaron a la maestra de sexto grado. Fue un problema muy grande, a punto tal que se reunieron los profesores, los "hermanitos" (de la congregación religiosa a cargo de la escuela). Un grupo de madres hizo bastante lío porque la maestra le había puesto notas bajas. Y los chicos la insultaron, le escribían cosas feas de verdad. Algo muy desagradable. Por eso, cuando pasan por la televisión a esos chicos que agreden a las maestras y siempre son de un nivel social bajo, yo me indigno. Porque en los niveles sociales altos pasa lo mismo pero se tapa todo. Nadie va a salir en un medio exponiendo esto que le hicieron a la maestra de sexto grado, que fue una verdadera injusticia. Y encima, las madres, cuando se enteraron que la habían echado se reunieron en una confitería en la esquina de la escuela, y lo festejaron como si hubiera sdo un triunfo. Creo que no es un buen ejemplo el que le estábamos dando a los chicos. No sé... me parece que es un mal precedente".
Capítulo 3: Soñando la nueva argentina
Entren a la página web del colegio, en la columna de la derecha, en la "Editorial" que lleva como título "Soñando la nueva argentina". A lo mejor puedan comprender cómo se sueña en este colegio de alta categoría. ¿Será así, del modo que este directivo semblantea al gobierno legítimamente elegido? Veamos (Las negritas las pusimos nosotros):
- "Intolerable y violenta la presencia de cierto sindicalismo muy K , tan jurásico como K, que ataca con inusitada violencia, aísla fábricas, supermercados, amedrentando al simple ciudadano y sembrando caos a los cuatro vientos".
- "La patológica y persistente regresión a la década del setenta demonizando arbitrariamente a unos y angelizando hipócritamente a otros, en fino ejercicio de fragmentación de la unidad social. La persistente sospecha y el miedo a los “generales mediáticos” y el profundo desprecio por los generales de carne y hueso, que al fin y al cabo, son soldados de la Patria".
- "Hay una política de relación muy estudiada, leída en los manuales de las revoluciones fracasadas. Yo lo experimenté en Angola en 1986 en pleno poder marxista".
Después de leer la editorial, comprendí la pregunta de la nena, el episodio de la maestra, y las preocupaciones de mi amiga. Los mensajes, claros y concisos, ya están echados sobre la mesa.
Capítulo 3: Soñando la nueva argentina
Entren a la página web del colegio, en la columna de la derecha, en la "Editorial" que lleva como título "Soñando la nueva argentina". A lo mejor puedan comprender cómo se sueña en este colegio de alta categoría. ¿Será así, del modo que este directivo semblantea al gobierno legítimamente elegido? Veamos (Las negritas las pusimos nosotros):
- "Intolerable y violenta la presencia de cierto sindicalismo muy K , tan jurásico como K, que ataca con inusitada violencia, aísla fábricas, supermercados, amedrentando al simple ciudadano y sembrando caos a los cuatro vientos".
- "La patológica y persistente regresión a la década del setenta demonizando arbitrariamente a unos y angelizando hipócritamente a otros, en fino ejercicio de fragmentación de la unidad social. La persistente sospecha y el miedo a los “generales mediáticos” y el profundo desprecio por los generales de carne y hueso, que al fin y al cabo, son soldados de la Patria".
- "Hay una política de relación muy estudiada, leída en los manuales de las revoluciones fracasadas. Yo lo experimenté en Angola en 1986 en pleno poder marxista".
Después de leer la editorial, comprendí la pregunta de la nena, el episodio de la maestra, y las preocupaciones de mi amiga. Los mensajes, claros y concisos, ya están echados sobre la mesa.
Y como siempre, esto tampoco resiste un archivo.
2 comentarios:
No termino de entender la relación entre un acontecimiento y otro.
Es llamativo que una nena chica diga tener una postura sobre el conflicto. Es obvio que sólo repite lo que los padres le dijeron y punto.
Por otro lado, también puede ser extraño que en la página de un colegio se haga un editorial tan político.
Ahora, no entiendo la referencia a que el gobierno está legitimamente elegido. Eso significa que, además de impunidad, también deben estar exentos de toda crítica?
No veo que el editorial diga "hay que tomar las armas y derrocarlos".
Me parece que hay una confusión entre "voto popular" y "democracia" y entre "gobierno legítimo" y "gobierno intocable".
Nanopoder
Creo que la referencia al "gobierno legítimamente elegido" es respuesta a la defensa que se hace a los "soldados de la Patria" que dicho de ese modo es un poco... ¿gorila?
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